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miércoles, 30 de mayo de 2012

Feeling Like In Another World Cap 4/ Amigos+Piscina= Tarde Perfecta


Este capítulo lo público un poco tarde porque estaba castigada sin ordenador (-.-") Pero bueno aquí lo tenéis y espero que os guste mis amoreeeees!!! <3333 Quizás es un poco repetitivo pero quería que todas narraran un poco :)

[...Estela...]
"¿Qué me pongo?" pensé delante de mi armario cogiendo alguna que otra camiseta, pero como no me convencían las volvía a poner en su sitio. Gracias al mensaje de la maja de Tamara me tenía que quebrar la cabeza buscando algo bonito que ponerme. "Ponte guapa han venido unos amigos de Sia ¡Ah! Y la piscina ya está arreglada tráete el bikini :) Besos" eso es lo que puso y yo quise aniquilarla en ese momento que ya estaba vestida.
-Genial más que genial- resoplé.
Al cabo de un buen rato me decanté por unos shorts, una camiseta marrón y azul y unas sandalias marrones, era sencillo pero me gustaba como quedaba. Me puse el bikini, uno que me compré hace poco de color negro en las rebajas. Me dejé mi pelo liso suelto y no me maquillé ya que usaríamos la piscina y sería una tontería. Tenía la música puesta y unos golpes en la puerta de mi habitación hicieron que parara la música.
-Estela baja el volumen de la música- dijo la voz de mi hermanastro al otro lado.
-Vale- la bajé un poco, yo quería escuchar la música más alta así no la puedo disfrutar.
Me senté un rato en la cama mirando los posters que tenía en la habitación sonriendo y cantando la canción que sonaba de Simple Plan, Can't take my hands off you. Como me gustaban mis posters sobre todo los de Liam Payne mi chico favorito del grupo One Direction. Mi móvil sonó y lo cogí. 
-¿Si?
-Estela necesito tu ayuda ahora mismo, es un asunto urgente- dijo la voz de Lotta
-Dime cielo- sonreí podría ser cualquier cosa viniendo de ella.
-Recibí un mensaje de Tamara que ponía que me pusiera guapa que venían unos amigos de Sia...
-Si, a mi también me ha llegado- al menos no era a la única que le habían dicho eso.
-Bueno el caso estaba pensando en que ponerme, ¿tu cual crees que es mejor? ¿La camiseta a rayas tipo cebra que dice "soy una chica salvaje y nada me puede parar" o la blanca con letras en colores fosforito que dice "soy una chica positiva, alegre y que le gusta llamar la atención"?- me la imaginaba con las dos camisetas en las manos mirando las posibilidades de cada una y me reí un poco.
-Bueno la de rayas está muy bien, es una de mis favoritas ponte esa- dije sonriendo y mirándome al espejo de mi habitación.
-Vale muchas gracias Estela te debo una muy grande.
-De nada para eso estamos, ¿te has puesto el bikini?- seguro que se le había olvidado.
-¡Mierda! Sabía que se me olvidaba algo- me reí y ella también- bueno cariño luego nos vemos que paso a recogerte, ¿ok?
-Vale adiós.
-Adiós- colgué.
Y ahora me tocaba esperar hasta que vinieran Lotta y Paola y no sabía exactamente cuando iban a venir así que me conecté a Twitter. Se seguía hablando aún de la chica que salía en la foto de Harry y ahora se le sumaba la chica que hablaba Niall, una tal "T". ¿Los chicos estaban de vacaciones y ya dos de ellos hablaban de chicas? Esto era increíble pero me alegraba por ellos, si eran felices yo también lo era. Cuando pensé que no vendrían Paola y Lotta a por mi, el timbre sonó, cogí mi mochila y me fui a ver a mis amigas.
-Hola chicas- dije dándoles un abarazo.
-Hola me encanta tu conjunto es "voy cómoda pero mona a la vez"- Lotta era una gran experta en moda y siempre estaba comentando los conjuntos que llevábamos. 
-Gracias- dije guiñándole un ojo- ¿vamos?
-Oh si nena vamos a conocer a esos amigos de Sia- dijo Paola comenzando a andar- ¿Cómo creéis que serán?
-¿Humanos?- dijo Lotta riéndose por su broma.
-Ja ja ja que graciosa Lotta hasta ahí llego- Paola puso los ojos en blanco.
-Bueno bueno bueno, haya paz chicas que siempre estáis igual- dije poniéndome en medio y cogiéndole a las dos de los brazos.
-Está bien- dijo Lotta guiñándole un ojo a Paola- contestaré a tu pregunta, serán ingleses y eso espero. ¡Son todos tan guapos!- suspiró.
-No pienses en chicos si estás con Marco.
-No me hables de ese imbécil por favor Estela, ¿os podéis creer que se esté ligando a la pelo fregona de Mannuela?
-Te lo mereces Lotta ya te advertimos Estela, Tamara y yo que era un cerdo que solo te quería para calentarle por las noches.
Marco es el novio de Lotta y a en mi punto de vista y el de mis amigas, un auténtico imbécil. Y Paola no sabía decir las cosas con más tacto por la sinceridad con la que siempre decía las cosas.
 -Paola te has pasado.
-Estela es la verdad y creo que tengo razón, ¿no Lotta?
-Si teníais razón todas, la próxima vez que le vea le dejo no sin antes darle un puñetazo en la cara que se lo merece- nos reímos.
-Le sujetamos si quieres, yo también tengo ganas de darle un puñetazo se lo merece el muy cabrón- dijo Paola revolviendo el pelo de Lotta.
-¿Ahora podemos hablar de otra cosa cielos? Me estoy deprimiendo y no quiero conocer a los amigos de Sia con esta cara si me quiero ligar a alguno- nos volvimos a reír, Lotta siempre estaba igual.
-Podemos hablar de la fiesta de Tamara, ¿alguna idea Estela?- me preguntó Paola y yo asentí orgullosa.
-Fiesta en la playa, en la de su finca, ¿qué os parece? Luego nos podríamos quedar en la casa que tienen allí a dormir y arreglado. Como los otros años y luego al día siguiente el día de la hoguera.
-¡Toma ya fiesta en la playa!- dijo Lotta dando palmadas y saltitos- Tenía ganas de una y si la organizas tu será la caña. Mejor que la de hace dos años y mira que esa fue buena.
A mi me encantaban las fiestas por lo que era una experta en ellas. Mis amigos me preguntaban si podía organizarla y yo por supuesto accedía. Todos decían que si las fiestas las preparaba yo eran las mejores y todo el mundo se lo pasaba bien.
-Tía tienes un talento con las fiestas, deberías de dedicarte a eso cuando seas mayor serías la mejor- agregó Paola con una sonrisa.
-Incluso podrías organizar las fiestas de los famosos, ¿te imaginas?
Nos pasamos casi todo el camino para la casa de Tamara hablando sobre como serían las fiestas de los famosos y después nos pusimos a hablar sobre lo que nos pondríamos en la fiesta de la playa y en el festival. Para la fiesta era fácil, es más ya sabía lo que ponerme, pero la ropa del festival era otra historia. Me podría comprar algo pero sabía que mi madre no me daría dinero para comprarme algo si el idiota de mi padrastro le decía que no. Quizás podría pedirle algo a mi padre pero sabía que como estaba en Londres trabajando quizás no podía enviarme nada. Mis padres estaban divorciados desde que tenía 10 años y mi madre estaba con su novio, mi padrastro, desde hacía 7 años más o menos. Él me caía fatal, me trataba muy mal e intentaba convencer a mi madre de que yo era la mala y que era la que siempre estaba en contra suya. Y para colmo tenía un hijo un poco mayor que yo un años me sacaba y nos llevábamos también muy mal. Por lo que mi vida en familia era un auténtico infierno. Como deseaba tener la misma suerte que Tamara y Sia.
-Ya hemos llegado chicas... Que nervios- dijo Paola apretándome un poco la mano- ¿No lo estáis vosotras?
-Un poco- dije yo sonriendo y respirando hondo.
-Un poco bastante querrás decir- dijo Lotta avanzando la primera y llamó al timbre.
Unas voces y unas carcajadas se escucharon dentro de la casa de Tamara y Sia y la misma Tamara nos abrió la puerta.
-Hola chicas, ¿qué tal?- dijo ella con una gran sonrisa.
-Genial deseando probar tu piscina- Paola enseñó la cuerda de su bikini para enfatizar más la idea.
-Y con ganas de conocer a los amigos de Sia- dijo Lotta dándole un codazo a Tami.
-Pues si tan ilusionadas estáis pasad- dijo ella abriendo la puerta.
-¿Donde dejamos las mochi...- pregunté llegando al salón y quedándome totalmente sorprendida al ver a los cinco chicos que estaban sentados en el sofá y que reconocería a kilómetros.
-¡Oh Dios mío!- dijo Lotta llevándose una mano a la boca y sonriendo.
-El "Oh Dios mío" se queda corto querida- dijo Paola impulsivamente.
Los chicos que estaban en el salón de Tamara y de Sia eran mi grupo favorito, bueno nuestro grupo favorito, One Direction. ¿Qué hacían ellos aquí? No me lo puedo ni creer, están enfrente mía.
-Hola chicas- dijo Sia liberándose de los brazos de Harry Styles y acercándose a nosotras para darnos un gran abrazo- ¿qué os parecen mis amigos?
-Guau- dijo Lotta.
-Increíbles- dijo Paola.
-Perfectos- dije yo con una sonrisa.
-Ya me imaginaba yo- dijo ella sonriendo- os presento Zayn, Liam, Harry, Niall y Louis ellas son Paola- esta se adelanto y le dio dos besos a cada uno.
-Encantada de conoceros chicos, quiero decir que sois mucho más guapos en persona.
-Gracias y tu eres mucho más guapa de lo que Tamara y Sia me decían- dijo Zayn guiñandole un ojo y sonriendo.
-Vaya gracias- dijo ella sonrojada.
-Ella es Carlotta pero todo el mundo la llama Lotta- dijo Sia con una sonrisa.
-Hola chicos, encantada de conoceros- le dio dos besos a cada uno.
-Bonita camiseta- dijo Louis con una sonrisa.
-Gracias, me encantan las rayas.
-Y por último ella es Estela- me señaló.
¿Sia acababa de decir mi nombre verdad? No sabía si me lo había dicho porque estaba muy muy nerviosa. Le di dos besos a cada uno aunque dudé un poco con Liam, vaya estaba tan cerca y le acababa de dar dos besos. ¡Esto es increíble!
-Y ya está, no creo que venga nadie más- dijo Sia- a no ser que sea mi madre y Peter, en ese caso habrá que dar más explicaciones.

[...Paola...]
-¡Oh Dios mio!- dijo Lotta llevándose una mano a la boca por la sorpresa y sonriendo.
-El "Oh Dios mío" se queda corto querida- dije yo rápidamente, fue un impulso decir eso.
¿Qué hacía One Direction en casa de Tamara? ¡Aaaaaah! Mis ídolos estaban delante mía, a unos pocos pasos.
-Hola chicas- dijo Sia levantándose de al lado de Harry Styles y nos dio un abrazo- ¿qué os parecen mis amigos?
-Guau- dijo Lotta.
-Increíbles- dije yo sin pensar.
-Perfectos- dijo Estela, esa palabra la debería de haber utilizado yo.
-Ya me imaginaba yo- dijo Sia y sonrió- os presento Zayn, Liam, Harry, Niall y Louis ellas son Paola- ¿por qué tenía que ser yo la primera?
Bueno daba igual, al fin y al cabo tendría que presentarme. Me acerqué a ellos y les di dos besos a cada uno.
-Encantada de conoceros chicos, quiero decir que sois mucho más guapos en persona- y era verdad, como cambiaban las cosas de verles en pantalla a tenerles tan cerca.
-Gracias y tu eres mucho más guapa de lo que Tamara y Sia me decían- dijo Zayn guiñándome un ojo y sonriendo.
¿En serio Zayn Malik me acaba de decir eso? Madre mía de mi alma creo que me voy a poner a gritar de un momento a otro, pero tenía que contenerme. Me tomarían por una fan loca y yo no quería eso.
-Vaya gracias- no sabía que más decir, estaba más roja que un tomate ahora mismo.

-Ella es Carlotta pero todo el mundo la llama Lotta- dijo Sia.
-Hola chicos, encantada de conoceros- le dio dos besos a cada uno, como si fueran amigos de toda la vida ¿cómo podía Lotta tener tanta naturalidad?
-Bonita camiseta- dijo Louis sonriendo.
-Gracias, me encantan las rayas.
-Y por último ella es Estela- dijo Sia y pude ver cierta tensión en los movimientos de Estela.
Estela era una caña para las fiestas además era muy habladora pero a la hora de conocer gente nueva era un poco tímida. Y si a conocer gente nueva le sumabas que esa gente nueva sea One Direction creo que la pobre estaría atacada de los nervios.

[...Lotta..]
-¡Oh Dios mio!- dije llevándome la mano a la boca por la sorpresa.
-El "Oh Dios mío" se queda corto querida- dijo Paola impulsivamente.
¡Oh Dios! One Direction estaba enfrente mía, allí sentados en el sillón del salón de la casa de Sia y de Tamara. ¿Y qué hacían ellos aquí? Joder necesitaba saberlo ya.
-Hola chicas- dijo Sia quitándose los brazos de Harry Styles de alrededor suya y nos abrazó a las tres a la vez- ¿qué os parecen mis amigos?
-Guau- dije sin pensar.
-Increíbles- dijo Paola impulsivamente.
-Perfectos- dijo Estela, ¿por qué no había dicho yo eso?
-Ya me imaginaba yo- dijo Sia sonriendo- os presento Zayn, Liam, Harry, Niall y Louis ellas son Paola- dijo su nombre y ella se acercó y le dio dos besos a cada uno.
-Encantada de conoceros chicos, quiero decir que sois mucho más guapos en persona.
-Gracias y tu eres mucho más guapa de lo que Tamara y Sia me decían- dijo Zayn guiñándole un ojo y sonriendo.
Vaya, vaya... Zayn Malik intentando ligar con Paola, aquí hay temita. Pero sabía que Paola era muy difícil y no saldría con cualquiera, aunque sea Zayn. Creo que ella era la chica más difícil de toda Italia y sin exagerar. Un chico estuvo intentando ligar con ella un mes y medio y al final lo único que consiguió fue tan solo un beso.
-Vaya gracias- dijo ella totalmente roja.
-Ella es Carlotta pero todo el mundo la llama Lotta- mi turno.
Se natural, se natural...
-Hola chicos, encantada de conoceros- dije dándoles dos besos a cada uno con toda la naturalidad del mundo.
-Bonita camiseta- dijo Louis sonriendo.
-Gracias, me encantan las rayas- que buena decisión había sido ponerme esta camiseta, sabía que a alguien le iba a gustar pero no sabía que esa persona era Louis Tomlinson.
-Y por último ella es Estela- ella se adelantó un poco tensa, normal se la veía muy nerviosa.
Le dio dos besos a cada uno y vi que se relajaba muy poquito a poco.
-Y ya está, no creo que venga nadie más- dijo Sia- a no ser que sea mi madre y Peter, en ese caso habrá que dar más explicaciones.
-¿Puedo preguntar algo?- dijo Paola dejando la mochila en una de las mesas del salón- ¿De qué os conocéis?
-Eso te lo deberían de explicar Harry y Sia- dijo Louis y decidí sentarme a su lado ya que había un hueco.
-Bueno pues entonces deberías de contárnosla, ¿no crees Sia?- dije yo con una gran sonrisa.
-Os la contaré todo empieza...
-Si empiezas así parece un poco aburrida cariño- dijo Estela riéndose mientras se sentaba entre Liam y Niall.
-Si os ponéis así no la cuento- se sentó al lado de Harry y se rió.
-Cuenta cuenta, no habrá más interrupciones o sino...- hice sonar mis nudillos y todos se rieron.
-Cuidado con ella nunca dice faroles- dijo Tamara.
-Bueno empiezo, ¿os acordáis del día que nos conocimos verdad?- todas asentimos- Esa tarde quedé con alguien.
-¿El chico ese del que nos habló Tamara?- preguntó Estela.
-Si el mismo, ese chico era Harry- le señaló con una mano y él sonrió- Por la mañana me fui a dar una vuelta por la playa, nos chocamos allí, yo le grité...
-¡¿Le gritaste?!- dijimos Estela, Paola y yo a la vez.
-Otra vez igual si le grité, ¿qué pasa?- dijo Sia algo molesta.
-Es que es muy raro que a Harry Styles le grite alguien y más raro una chica- dijo Tamara sonriendo mientras se comía con Niall una bolsa de patatas.
-No te enfades Sia- dijo Harry despeinando su pelo- sigue contándola.
-Seguimos le grité, cogí su móvil por error y luego quedamos por la tarde para devolvérnoslo- ella sonrió.
-Y los días siguientes nos seguimos viendo- dijo Harry con una gran sonrisa.
-¿Y tú Tami desde cuándo sabes esto?- preguntó Estela.
-Pues desde esta mañana, si lo hubiera sabido antes os lo hubiera contado.
-Sia deberías habernoslo dicho- dijo Paola.
Entonces nos empezaron a contar lo que hacían aquí, cosas sobre ellos... Nos conocíamos cada vez un poco más y descubrí que eran unos chicos muy simpáticos, aunque eso ya lo sabía. Gastábamos bromas sin parar sobretodo Louis y yo que no parábamos de reír y reír. Pronto nos pusimos a hablar nosotros de tonterías y siguieron las risas entre Louis y yo.
-Me estoy asando de calor, ¿vamos a la piscina?- preguntó Tamara levantándose del sillón.
-Por mi vale- dijo Niall inmediatamente.
-Vale vamos- dijimos los demás.
Suerte que Estela me había recordado lo de la piscina sino me tendría que quedar sentada en una de las hamacas del patio sola, o bañarme en ropa interior. Nos levantamos todos y nos dirigimos al patio trasero de la casa que había sido reformado muy recientemente, por eso la piscina no estaba lista hasta hoy.
-Vaya vaya Sia bonito jardín- dijo Harry.
-¡Menuda piscina la habéis hecho más grande!- dijo Estela que ahora se la veía mucho más cómoda que antes.
 -Si y por fin la podemos estrenar- dijo Tamara dando palmas,luego se quitó el vestido para dejarlo encima de una de las hamacas y cogió carrerilla.
-¡Bomba!- gritó Tamara mientras se tiraba a la piscina- Que buena está el agua- se quitó el pelo de la cara.
-Ahora me toca a mi- dijo Niall quitándose la camiseta y tirándose detrás de ella.
-Esperad- Sia se quitó la camiseta y los shorts que tenía y se tiró de cabeza.
-Vamos a salpicar un rato- Harry se quitó la camiseta y se tiró de bomba justo como Tamara.
-Eres un bruto casi sacas toda el agua de la piscina- dijo Sia haciéndole una ahogadilla.
-¡Eh!- se empezaron a hacer ahogadillas.
Me quité la camiseta a rayas y los pantalones y los dejé encima de las hamacas. Los demás hacían lo mismo y creo que estaba babeando demasiado al verles a todos sin camisetas. Meneé la cabeza y miré rápidamente mi móvil, oh mierda un mensaje de mi madre. "Lotta esta noche saldré así que no me esperes despierta, puedes quedarte en casa de una de tus amigas si quieres o si eso vete a la de la abuela. Te quiero" eso era lo que ponía y suspiré. Siempre estaba igual, mi madre era muy joven y encima era madre soltera. El único miembro de mi familia al que veía era a mi abuela cuando venía a cuidarme o iba yo a su casa a visitarla. Odiaba que mi madre se pasara las noches fuera haciendo no se que cosas y luego volviera al día siguiente con un regalo para mi para disculparse por no haber estado en todo el día. La echaba mucho de menos y deseaba recuperar a mi madre de antes la que me cuidaba y era mi mejor amiga.
-¿Qué te pasa Lotta?- dijo Louis a mi lado.
-Nada un mensaje de mi madre, solo eso- no quería hablar de ello por lo que metí el móvil en el bolsillo de mis shorts y me zambullí en el agua seguida por los demás.

[...Tamara...]
-¿Algún plan para mañana?- dijo Harry intentando subirse a una cama hinchable que flotaba en la piscina.
Después de estar mucho tiempo metidos en la piscina jugando, nadando y saltando algunos nos salimos y nos tumbamos en las hamacas, otros estaban sentados en el bordillo de la piscina con las piernas metidas en el agua y Harry y Sia estaban tumbados en las camas hinchables.
-¿Por qué no celebramos mañana la fiesta de la playa?- pregunté, tenía ganas de celebrarla ya que llevaba dos años sin tenerla.
-¿Sabes qué era de eso de lo qué estábamos hablando mientras veníamos?- dijo Lotta- Tía creo que tenemos algún tipo de conexión intrasensorial.
-Es extrasensorial Lotta- dijo Paola riéndose.
-Bueno ya tiene que hablar la próxima premio Nobel de medicina- dijo Lotta con sarcasmo.
-Eso no es saber medicina es cultura general, ¿por qué siempre qué intento corregirte en algo me saltas con mi carrera de medicina?
-¿Estudias medicina?- preguntó Zayn sorprendido.
-Si llevo un año en la universidad en Roma estudiando medicina y estoy esperando para hacer una prueba para irme a Londres a estudiar- dijo ella muy orgullosa.
La verdad Paola era una genio. Sacaba buenísimas notas y le encantaba estudiar, aunque eso le venía de familia. Todos ellos eran italianos y médicos o de alguna rama que tenga que ver con la medicina. En el caso de Paola su madre es pediatra y su padre es cirujano y se conocieron en el hospital donde trabajan.
-Y la aprobará aunque no estudie- dije yo dándole un abrazo.
-Tengo que estudiar por lo menos dos semanas antes de la prueba.
-Y en esas dos semanas antes de la prueba no saldrá de su habitación creo que ni para ir al baño- dijo Lotta y Paola la fulminó con la mirada.
Si las miradas matasen ahora mismo me hubiera quedado sin mi Lotta.
-Chicas relajaos- dijo Estela para mantener la paz.
-Ha empezado ella- dijeron a la vez y se señalaron.
-Me da igual quien haya empezado Lotta no te metas con los estudios de Paola y tu Paola tendrás que darle la razón a Lotta por lo último que ha dicho- dijo Estela riéndose.
-¿Por qué?
-Si recuerdas, para la selectividad estuviste desde que acabaste las clases hasta el último momento estudiando, ni saliste para despejarte ni nada.
-Vale tienes razón pero era muy importante me jugaba mi entrada a la universidad y mi futuro- dijo un poco enfadada.
-¿Están siempre discutiendo?- preguntó Niall en mi oído.
-Casi siempre, luego Estela interviene y se les olvida su enfado- sonreí-. Si en realidad Lotta y Paola son inseparables, no sabrían que hacer la una sin la otra.
-Estela se parece mucho a Liam, los dos son como nuestros padres- se encogió de hombros.
-Están hechos el uno para el otro- nos reímos.
-¿Al final qué pasa con la fiesta?- preguntó Sia desde la colchoneta- Os habéis puesto a discutir y ya no habláis de ese tema.
-¡Es verdad!- dijo Lotta.
-Preguntádselo a Estela ya lo tiene planeado- dijo Paola con una sonrisa.
-Pues si, tenía pensado en quedarnos todo el día allí y luego por la noche cuando está todo preparado que vengan los demás y... ¡Qué empiece la fiesta!
-¿Y luego tendremos qué volver?- preguntó Louis.
-No- dije yo con una sonrisa- nos quedaremos a dormir allí al día siguiente es el día de la hoguera.
-¡¿En la playa?!- dijo Harry sorprendido, creo que no había estado en demasiadas fiesta en la playa.
-Claro o sino nos podríamos quedar en la casa que tenemos allí- le dije sonriendo.
-¿En cuántas fiestas en la playa has estado Harry Styles? Se diría que en ninguna- dijo Sia riéndose.
-En muchas para tu información, pero nunca me había quedado a dormir en una playa- dijo Harry despeinando a Sia.
-Bueno hay primeras veces para todo- dijo Estela sonriendo.
-Si ya tienes un plan para la fiesta Estela creo que no me debo preocupar de si les va a gustar o no.
-Ella es una máquina con las fiestas- dijo Lotta con una sonrisa- cada vez las organiza mejor.
-Pues eso mañana y pasado tenéis planes con nosotras- dije yo.
-Por mi de acuerdo, ¿a qué hora pasamos a recogeros?- preguntó Louis.
-Por la mañana- dijo Estela- nos espera mucho trabajo si queréis que esa fiesta este lista para mañana por la noche.
-¿Tendremos que limpiar?- dijo Louis con cara de sufrimiento fingido.
-¿Cómo limpias tú una playa privada?- dijo Harry riéndose.
-¿Quitando las mierdas que hayan?- dijo Louis sonando lógico.
-No hará falta que limpiéis chicos, bueno si acaso unas algas- sonreí.
-Puaj, que asco- dijo Lotta- les tengo un asco inmenso.
-Pero si son solo plantas no creo que te vayan a hacer nada- dijo Louis guiñándole un ojo.
-Ahora no querido Louis, pero después de que Paola empiece a experimentar con ellas puede que las algas se conviertan en seres mutantes y destruyan todo a su paso- todos nos reímos menos Paola.
-Ni puta gracia Lotta te has pasado- dijo ella enfadada- cuando mis algas te puedan salvar la vida luego vendrás llorando- se rió, creo que se le había pasado.
-Está bien "próxima descubridora de la cura contra el cáncer"- se dieron un gran abrazo y ambas volvieron al sitio de antes.
-¿Podemos seguir hablando de la fiesta? Nos estamos desviando del tema otra vez- dijo Sia.
-Bueno pues eso que mañana por la mañana organizamos todo, por la noche la fiesta y al día siguiente por la noche la fiesta de la hoguera- dijo Estela.
-¿Qué es eso de la fiesta de la hoguera?- preguntó Liam.
-La fiesta de la hoguera es una fiesta que se celebra justo el día después del de la fiesta de la playa y dos semanas antes del comienzo del festival- expliqué.
-Vaya, ¿desde cuándo hacéis eso?- preguntó esta vez Niall.
-Desde que tenemos 10 años y eramos unas mocosas- nos reímos todas.
-Pero estaba Manuela con nosotras- dije algo entristecida por nuestra ex-amiga.
-Ni me menciones a esa por favor- dijo Lotta entre dientes.
-¿Y eso?
-El imbécil de Marco que está ligando con ella....
-Que cabrón pero ya te dijimos lo que pasaría si salias con él.
-Una pregunta que me estoy perdiendo, ¿quién es Marco?- preguntó Lou.
-Marco es el gilipollas de mi novio que en cuanto le vea se va a enterar de lo que es bueno- dijo todavía enfadada.
Un móvil empezó a sonar y era el de Estela, lo miró un poco preocupada y su rostro cambió.
-¿Qué pasa Estela?- dijo Sia desde la colchoneta.
-Es mi madre dice que me vaya ya a casa- dijo con tono triste.
-¿Te vas ya?- dijo Liam un poco apenado.
-Si, pero mañana por la mañana nos vemos a las diez aquí- dijo ella sonriendo y poniéndose la ropa.
-Si quieres te acompaño hasta tu casa así mañana podremos buscarte desde allí- dijo Liam con una sonrisa.
-No déjalo puedo ir yo sola además no me cuesta nada venir hasta aquí.
Sabía perfectamente porque decía eso, por su peculiar familia. A veces deseaba que ella se marchara a Londres con su padre y pudiera vivir más feliz y mejor allí. Joder como odiaba ver así a mi amiga.
-Bueno cariño entonces nos vemos mañana- dije dándola un abrazo y un beso en la mejilla.
-Adiós chicos a sido un gran gusto conocerles, ya puedo borrar uno de mis sueños de mi lista de sueños- dijo ella con una gran sonrisa.
-Awww que mona- dijo Niall mientras la abrazaba- ¿y qué más sueños tienes en esa lista?
-Mmm... Ir a un concierto vuestro, conseguir una beca para estudiar periodismo en Londres... Muchos sueños y están todos apuntados en esa lista.
-Podrás dentro de poco cumplir otro al menos el del concierto- dijo Liam sonriendo y abrazándola.
-¿De verdad? ¿Cuándo?- dijo ella muy ilusionada.
-¿Qué tal mañana en la fiesta de la playa? Un conciertillo privado, ¿qué os parece?
-Vale- dijeron todos.
Estela se fue despidiendo de todos y la acompañé hasta la puerta de entrada.
-¿No crees qué deberías de haber dejado que Liam te acompañara? Una oferta así yo no la hubiera dejado pasar- dije con una sonrisa.
-Ya sabes porque es cielo- se encogió de hombros- hasta mañana Tami, gracias por esta tarde no me lo pasaba tan bien desde hacía tiempo.
-De nada tu te mereces esto y más- sonreí y la abracé.
Vi como salía por la puerta y la cerré. Volví al patio donde todos estaban bromeando y tirándose de nuevo a la piscina. Sin duda este verano iba a ser inolvidable.




















jueves, 24 de mayo de 2012

Feeling Like In Another World Cap 3/ Presentaciones


Espero que os guste :3

[...Alessia...]
Habían pasado dos semanas desde que Harry y yo nos conocimos. En esas dos semanas habíamos quedado casi todos los días y me había presentado a los demás del grupo, Louis, Niall, Zayn y Liam. Todos me habían caído muy bien y me lo pasaba genial con ellos. Estaba acostada en mi cama, mirando al techo escuchando música y mirando mi Twitter en el móvil. Harry subió hace dos días una foto de nosotros dos aunque a mi apenas se me reconocía, tenía puesta las gafas que me regaló y un mechón de pelo haciendo de bigote, y era de lo único que se hablaba. Quien era esa chica, que si salía con Harry, que si era una fan... Muchos tweets intentando adivinar quien era la identidad de esa persona pero nadie acertaba. Creo que si sabían que era yo tendría muchas menciones con insultos, por eso Harry no me mencionó y no dijo a nadie quien era yo. Estos días con él me lo había pasado genial no, lo siguiente y siempre pasaba algo con lo que nos reíamos a más no poder. Tamara me preguntaba a cada vez más quien era ese chico y como no le decía nada se cabreaba y al cabo de un rato volvía con su cuestionario. Tendría que decirle quien era, no podía estar viéndome a escondidas con ellos todo el verano, además si se enteraba no me hablaría en toda la vida. En estos días tendría que contárselo si o si, quizás mañana. Me llegó un mensaje de Harry al teléfono: "Se te quedó ayer tu pañuelo, ¿quieres qué te lo lleve?". Le contesté: "¿Lo traes mañana cuando nos veamos?". Sonreí y me cambié de ropa que todavía estaba en pijama, como se notaba que no estaban ni Peter ni mi madre. Se fueron ayer a una convención gastronómica y tenían que ir por lo que estarían unos días fuera y eso significaba que Tamara y yo teníamos la casa para nosotras solas. Ella había planeado hacer una fiesta e invitar a muchas personas de aquí que ella conocía y a mi me parecía una idea estupenda, sería una buena excusa para que vinieran los chicos y decirle que los conocía. Me puse unos pantalones cortos, una camiseta de tirantes con el dibujo de Piolín en el centro y me quedé descalza. Mis planes de hoy eran ahora por la mañana no hacer nada y por la tarde Tamara y yo saldríamos con Lotta, Estela y Paola. En estas dos semanas nos habíamos conocido mucho y me habían caído muy bien, eran divertidas y nos lo pasábamos muy bien juntas. Con la que más había conectado era con Estela, nos parecíamos tanto que daba miedo. A las dos nos gustaban los mismos grupos musicales, el mismo equipo de fútbol (el Barça por supuesto) y en un montón de cosas más. Quité la música un momento y entonces escuché el ruido de que algo caía al suelo y se rompía. Oh no, Tamara.

[...Tamara...]
Cada vez tenía más y más ganas de saber quien era el chico con el que se veía Sia y, desde hacía dos días, la chica con la que estaba Harry en esa foto. Las dos cosas hacían que me comiera la cabeza adivinando quienes eran. Era un poco estúpido pero creo que Harry y mi hermana habían nacido para que me diera dolor de cabeza intentando adivinar todo lo que hacían. Estaba recién levantada con el pijama todavía puesto, mirando en la televisión la MTV y cantando un poco las canciones que salían. La verdad no es que cantara fatal pero la que de verdad cantaba bien era Sia. El problema era que tenía miedo no, un pánico escénico enorme que cuando estaba delante de muchas personas cantando se ponía más tiesa que un palo y no se podía ni mover. Yo quería que cantara porque tenía una voz increíble pero con ese problema no podía hacer nada. En fin, todo el mundo tiene un talento que por cualquier cosa no puede enseñar al mundo. Mientras pensaba reconocí el principio de la canción de One Thing de One Direction y me puse a cantarla y a bailarla. Subí el volumen y fui a hacerme el desayuno porque tenía mucha hambre, me preparé una taza de leche con colacao y cogí unas magdalenas que hizo Rosetta el día anterior. Dios esta mujer tenía unas manos increíbles a lo que se refiere a comida. Seguí cantando ajena a todo, me llevé las magdalenas a la mesita del salón y cuando fui a llevar la taza el timbre de la puerta hizo que me diera un susto. Joder, ¿quién sería a estas horas? Podría ser cualquier persona, eran casi las once y media de la mañana y creo que la gente a esta hora estaba despierta. Menos yo y mi hermana algunos días. Bajé un poco el volumen de la tele y bebiéndome el colacao de un sorbo abrí la puerta con una sonrisa. No me esperaba para nada los dos chicos que estaban con una sonrisa esperando a que les abriera. Ni yo ni nadie. Me quedé de piedra, paralizada, sin poder moverme justo como le pasa a Sia cuando cantaba delante de un montón de gente. Los chicos que estaban allí parados delante de mi casa eran Harry Styles y Niall Horan, los componentes de mi grupo favorito.
-Hola tu debes de ser Tamara supongo- dijo Harry con una increíble sonrisa y yo solo pude asentir- ¿está Sia despierta?
¿Sia? ¿Harry Styles preguntaba por mi hermana? ¿Por qué él preguntaba por mi hermana? Esto es muy raro. 
-¿Estás bien?- dijo Niall mirándome un poco preocupado.
La taza se me resbaló de las manos y se cayó en el suelo, por suerte estaba vacía y no manchó nada pero los trozos de porcelana volaron a todos lados.
-Joder te dije que no tendríamos que venir ya nos lo dijo Sia- dijo Niall que se acercó a mi y con cuidado cogiéndome de la cintura me alejó de los trozos de taza, en ese momento estaba hiperventilando.
-¿Qué pasa...- dijo mi hermana desde la escalera mirándonos con cara de "ya la has liado Tamara".
-Hola Sia, te dije que se te olvidó el pañuelo y te lo he traído- lo desató de su muñeca y lo agitó en el aire.
-¡¿Pero no te puse en el mensaje qué lo trajeras mañana cuando nos viéramos?!- dijo ella viniendo a la puerta con cuidado de no clavarse los cristales.
-Ya sabes como soy, no te hago caso en lo que dices, además hoy quería verte- le guiñó un ojo.
-Mirad lo que habéis conseguido- me miró a mi y me pasó una mano por delante de los ojos- ¿Tamara? ¿Tamara estás bien? Responde.
Moví la cabeza de lado a lado y quería responder pero no me salían las palabras. ¿De qué conocía ella a Harry y a Niall? ¿Pero qué estaba pasando aquí? Me estaba poniendo aún peor sino me contaban nada
-Ya te dije que viniéramos otro día Harry- dijo Niall recogiendo los pedacitos de la taza cuando me soltó de la cintura.
-No los recojas anda Niall pasad, cuidado con los trozos- dijo ella cogiendo la escoba y el recogedor y se puso a barrer- Tamara llévales al salón y reacciona.
Meneé de nuevo la cabeza y los guié aún callada al salón donde ya se estaba acabando la canción.
-Soy Niall aunque eso creo que ya lo sabrás- dijo él con una gran sonrisa- mira Harry a ver en que puesto vamos- Niall se sentó en el sillón y subió un poco el volumen cogiendo el mando.
-Yo Tamara y también lo sabrás por mi hermana y vais los terceros- dije sentándome yo también a su lado.
-¡Si habla!- dijo Harry sentándose a mi lado- Sia nos avisó de que te daría un ataque pero aún así quería venir- se encogió de hombros.
-Te voy a matar Harry así te lo digo- dijo mi hermana desde la cocina y dirigiéndose hacía Harry- ¿Pero por qué no me avisaste de qué venías?
-Quería darte una sorpresa y bueno... ¡Sorpresa!- Niall y yo nos reímos.
-Gracias por vacilarme señorito Styles- dijo con sarcasmo pero con una sonrisa.
-¿No querías decirle a tu hermana qué nos conocías? Pues aquí estamos, no todos pero si 2/5 de la banda... Con eso te vale, ¿no Tamara?- cada vez que me decía algo no me podía creer que me lo dijera, estaba todavía en estado de shock.
-Si, si claro.
-Mira como la tienes a la pobre- dijo Sia abrazándome- ¿Este chico malo qué no hace caso a nada de lo que le digo te tiene nerviosa?- Harry la despeinó y ella le hizo lo mismo- No vuelves otra vez como sigas así.
-Te arrepentirás de haberme dicho esas palabras, que digo que la chica de la foto eres tu- dijo amenazando.
-¿Eras tú?- señalé a Sia y ella asintió- ¿Me podéis explicar de que os conocéis?
-¿Recuerdas el chico con el que quedé el primer día?- asentí- El chico de la playa- vi como Harry y ella sonreían a la vez- es Harry.
-Cuéntale la historia venga.
-¿Es qué hay una historia?- pregunté curiosa por saber cada detalle de su amistad con Harry.
Wow todavía no me lo podía creer, Harry y Niall estaban en mi casa, estaban sentados en el sofá del salón.  Y lo mejor de todo, mi hermana los conocía. Mis amigas fliparían si vieran esto.
-Ajá- ella dijo y se acomodó en el sofá- bueno el día ese de la playa iba caminando mirando al mi móvil por la playa cuando Harry se chocó conmigo.
-¡Ah no! Tú te chocaste conmigo que no mirabas por donde ibas torpe- dijo Harry picándola.
-Habló aquí, el que miraba al cielo embobado- se empezaron a reír-. Bueno, nos chocamos, nos caímos, yo le grité porque estaba enfadada...
-Un momento, ¿le gritaste? dije sorprendida.
-Así me quedé yo- dijo Niall riéndose y cogió una de las magdalenas que estaban en la mesa.
-Si le grité, ¿pasa algo? Le gritaría igualmente al Papa si se chocara conmigo de esa forma- dijo ella algo molesta- ¿Puedo seguir?
-Si sigue sigue.
-Bien le grité, cogí su móvil sin querer de la arena y luego a la tarde quedamos para devolvernos los teléfonos.
-Después de eso nos fuimos a dar una vuelta y luego los demás días seguimos quedando- Harry sonrió.
-¿Por qué no me contaste nada de eso? Nos lo contamos todo y me ocultas esto- les señalé a Niall y a Harry- Sia sabes que es mi grupo favorito.
-Por la razón de lo que te acaba de pasar ahora mismo con la taza-dijo ella y yo me sonrojé- te los hubiera presentado en la calle y te hubieras puesto a gritar- dijo ella riéndose lo que hizo que me ruborizara aún más.
Que mala era Sia cuando quería.
-Bueno hay fans que se han puesto peor que ella, alguna que otra se ha desmayado o gritado como si hubiera visto un fantasma- dijo Niall en mi defensa y le dediqué una sonrisa.
-En eso tiene razón- dijo Harry riéndose.
-Normal le vieron la cara a Harry y se asustaron- Sia se reía a carcajadas.
-Se asustaron de lo guapo que soy- dijo él y se paso una mano por el pelo presumiendo.
-Mira que eres egocéntrico- dijo Sia moviendo la cabeza de un lado a otro.
-Gracias preciosa, es una de las virtudes que hacen de mi persona- se empezaron a reír los dos como si hubieran contado un chiste.
-¿No sabes inventarte tus propias contestaciones?- le tiro un cojín a la cara.
-¡Eh!- le volvió a tirar el cojín y pronto eso se convirtió en una pelea de almohadas.
Niall y yo nos reíamos a carcajadas y pronto nos unimos a la lucha de almohadas. No parábamos de reír, parecíamos niños de cinco años pero nos lo pasábamos genial. La verdad es que por un momento olvidé estaba con mis ídolos y solo pensé en que estaba entre amigos haciendo el tonto. Harry en uno de sus movimientos se tropezó y se cayó encima de Sia en el sillón, lo que hizo una reacción en cadena que me tiró a mi y luego a Niall que me sujeté a él para no caerme.
-Eres un torpe Harry- dijo Niall dándole otro cojinazo.
-Me caí, con los golpes que me dabais no sabía por donde iba.
-Lo que te decía Niall, eres un torpe- dijo Sia y Harry le hizo cosquillas.
Sia se liberó y salió corriendo con Harry justo detrás de ella.
-Están los dos igual de locos- dijo Niall volviendo a sentarse.
-Me lo dirás a mi que Sia vive conmigo.
-¿Desde cuando eres fan nuestra?- me preguntó al cabo de un ratillo.
-Pues desde siempre- sonreí.
-¿Desde siempre?- yo asentí orgullosa- ¿Y tú canción favorita?
-Lego House de Ed Sheeran- dije riéndome y él se unió a mis risas- ya se que te referías a vosotros. Pues... No lo sé me gustan todas, aunque si tuviera que elegir una seria More Than This que la cantáis todos.
-Mmm... Buena elección- me guiñó un ojo- Sia nos ha contado muchas cosas sobre ti- sonrió- aunque me caes mejor ahora que te conozco- me sonrojé.
No me podía creer que Niall Horan, el mismo Niall Horan que me enamoró nada más verle cantar y nada más verle, me decía que le caía bien. Porque sabía controlarme un poco que si estuviera sola me hubiera puesto a gritar como una histérica.
-¿Y qué no os ha contado?- le dije con una gran sonrisa y apoyando mi cabeza en mis manos.
-Pues no se, quizás me lo podrías contar tu- nos reímos.
Y allí le comencé a contestar a todas las preguntas que me hacía, nos reíamos y nos íbamos conociendo aún más. Descubrí que Niall era más que un chico con una cara bonita, que por dentro era una gran persona en la que podías confiar y en la que podías contar para lo que quisieras. Mientras tanto ni mi hermana ni Harry aparecían y como mi mente malpensada me supera, decidí no ir a buscarles.

[...Harry...]
La perseguí por toda la casa intentando atraparla pero se me escapaba, ella se conocía la casa y yo no por lo que eso jugaba a su favor. Se metió en una habitación y cerró la puerta con pestillo dejándome a mi en el pasillo sin poder entrar.
-¡Abre tramposa!- dije dando a la puerta y respirando con dificultad por la carrera que me había hecho.
-¡No!- gritó ella desde el otro lado riéndose.
Hay que ver menuda chica, otra la hubiera abierto enseguida. Aunque no podía comparar a Sia a otras chicas, ella era... Diferente. Si eso, diferente a las demás.
-Pues soplaré, soplaré y soplaré y la puerta derribaré- dije imitando la frase del cuento de los tres cerditos.
-Es la casa no la puerta- como no, ella siempre corrigiendo todo lo que digo.
-Bueno da igual, no creo que pueda tirar la puerta con un soplo- se volvió a reír y escuché como abría el pestillo lentamente.
-Me prometes que no me harás cosquillas cuando abra la puerta.
-Te lo prometo- dije y al momento pensé en otra cosa.
-Vale- abrió la puerta y entré lentamente.
Ella me miraba todo el tiempo por si hacía algo y cuando vio que no la iba a hacer cosquillas la cogí en volandas.
-¡Harry te dije que no me hicieras nada!- dijo ella gritando.
-Me dijiste que no te hiciera cosquillas.
Sia no paraba de reírse y me senté con ella encima mía en la cama.
-Eres un idiota que lo sepas- dijo ella liberándose de mi abrazo y levantándose de un salto.
-¿Esta es tú habitación?- pregunté.
-Si, ¿te gusta?
La habitación de Sia era de color rojo, no me imaginaba otro color que le quedara mejor a su personalidad, un escritorio debajo de la ventana, un gran enorme armario empotrado, unos muebles llenos de libros y papeles, las cortinas eran de color negro y una guitarra apoyada en una de las esquinas del cuarto.
-¿Tocas la guitarra?- dije cogiéndola y tocando algunos acordes al azar.
-Si- asintió ella sentándose en la cama.
-¿Cómo es qué nunca me lo has dicho?- que yo recordara no me lo había dicho, creo.
-Es que...- se quedó callada mordiéndose el labio- Bueno tengo mucho miedo escénico y no soy capaz de tocar para gente que no conozco.
-Toca para mi, no soy un desconocido, ¿no?- le pregunté con una sonrisa sentándome a su lado y poniendo la guitarra en sus piernas.
-Ya, pero...
-Ni peros ni nada- le dije poniendo un dedo en sus labios- toca algo, imagina que no estoy aquí- la animé.
-Está bien- suspiró y se acomodó en la cama para coger mejor la guitarra.
Comenzó a tocar una canción que conocía a la perfección porque nosotros también la cantamos. Use Somebody, pero ella la había retocado un poco y sonaba algo diferente. Lo siguiente que hizo no me lo esperaba y me quedé muy sorprendido cuando la escuché. Cantaba. Bien, genial, fantásticamente, de miedo... No creo que encontrara palabras para definir su voz. Estaba tensa, lo podía notar en sus hombros y en su posición totalmente recta. Me quedé embobado mirándola y escuchando como cantaba. ¿Cómo podía tener miedo escénico con esa voz que aunque lo hiciera algo mal sonaba bien? Sin darme cuenta me fui acercando más a su posición y automáticamente me puse yo a cantar también la canción. Sia me miró con una sonrisa, sin seguir de cantar y bajó la mirada de nuevo a la guitarra. Vi como se relajaba poco a poco mientras avanzaba la canción y pronto pude ver que estaba completamente relajada. Que bien sonábamos los dos juntos, no se como explicarlo pero sonaba genial. Cuando acabó la canción deseé que cantara otra solo para volver a escucharla cantar. Si pudiera me quedaría escuchando su voz a todas horas.
-¿Te han dicho que tienes una voz maravillosa?- le dije al cabo de un rato.
-Si, muchas, creo que demasiadas pero ya te dije tengo miedo escénico- se encogió de hombros-. Tu no sabes lo que es para mi cantar delante de alguien, acabo de hacer un esfuerzo sobrehumano para cantar ahora mismo.
-Dime como te has sentido cuando canté contigo- le pedí serio.
-Pues... No sé me sentí bien, como si estuviera cantando yo sola aunque sonara otra voz- sonrió.
-Quizás te sientas más cómoda cuando alguien canta contigo- sonreí- como sabes que está pasando por lo mismo que tú será eso lo que te relaja.
-Puede, pero eso no quita que pueda cantar delante de mucha gente como quiere que haga mi madre- dijo y agachó la mirada-. No soy tu Harry, yo no canto delante de miles y miles de personas y sentirme cómoda y bien haciéndolo. Yo es que... No puedo, tengo miedo de equivocarme y que todo el mundo se ría de mi y hacer un gran ridículo y...
-Shh- le volví a poner el dedo en los labios-. Si te equivocarás sonaría bien, tienes una voz increíble. Lo que daríamos los chicos y yo por cantar una canción contigo, puede que todo el oro del mundo- aquello la hizo sonreír y le devolví la sonrisa.
-¿Tú crees?- asentí.
-Tienes una voz preciosa- la cogí de las dos manos- nadie diría que tienes mala voz, quien se atreva a decirlo no tiene oído- se rió.
-Gracias Harry.
-¿Por qué me das la gracias?
-Por ser como eres y por ayudarme a superar un poco mi miedo escénico- me dio un beso en la mejilla y nos quedamos muy cerca el uno del otro.
¿Debería de besarla? ¿Se lo tomaría bien? No lo sabía, todavía no comprendía su cabeza, pero lo que yo quería era besarla en ese momento. Rápidamente ella se separó de mi y sonrió de nuevo. "Pero Harry, ¿qué te pasa con esta chica?" me decía a mi mismo. No era como ninguna chica que hubiera conocido antes.
-Tu tampoco lo haces mal señorito Styles- dijo ella sacándome de mis pensamientos.
-¿El qué?
-Cantar, ¿qué te crees que era?- dijo ella riéndose.
-Nada, nada- dije- ¿Cantamos otra?
Ella volvió a sonreír, de la forma en que hacía que mi corazón latiera como un tambor. Puso sus manos en la guitarra y empezó las notas de otra canción.

[...Niall...]
¿Qué estarían haciendo esos dos ahí arriba? No tenía ni idea y era mejor no pensar en lo que hacían. Mi mente sucia se adelantaba y me imaginaba cualquier cosa. Preferí quedarme hablando con Tamara, Sia me había hablado muchísimo sobre ella pero al conocerla me había gustado más. Teníamos muchas cosas en común como que nos gustaba el fútbol y jugábamos, bailábamos, nos gustaban casi las mismas comidas... Lo último era lo más importante y de lo que hablamos más. Nos reíamos y nos divertíamos juntos como si fuéramos amigos de toda la vida y hubiéramos quedado un día normal.
-¿Y tú cantas?- le pregunté curioso.
-Cantar canto, otra cosa es que lo haga bien- nos reíamos-. La que canta bien es Sia.
-¿Sia canta?- dije sorprendido, nunca nos lo había mencionado.
-Si y canta muy muy bien, tienes que escucharla es increíble. Nos os lo ha dicho porque tiene miedo escénico- me encogí de hombros.
-Pobrecilla- dijo él- tener miedo escénico y cantar bien...
-Ya es una pena, pero bueno.
-Una cosa, ¿tus amigas también son fans de nosotros?- ella asintió.
-Igual de fan que yo y eso quiere decir que mucho- nos reímos un poco.
-¿Qué te parece si quedamos todos esta tarde y las conocemos?- le propuse, quería volver a verla.
-Buena idea- dijo emocionada- aunque te digo, creo que les dará un ataque peor que el mío- nos volvimos a reír.
-¿Tendré qué llevarme tapones para los oídos?
-Algo más fuerte que tapones para los oídos la verdad.
Seguimos hablando hasta que escuchamos a Harry y a Sia bajando por las escaleras riéndose como siempre  que estaban juntos.
-Hola Tami hola Niall. dijo Sia sonriendo.
-Hola chicos, ¿qué tal arriba?- preguntó Tamara como insinuando y yo me reí por lo bajo.
-Muy bien, ¿sabías que Sia cantaba?- dijo Harry y le pasó un brazo por los hombros a Sia.
-Me lo acababa de decir Tami- dije llamándola de la misma forma que su hermana, quizás le gustaría y todo- yo quiero escucharla, ¿podrías cantar algo?
-Mmmm... Otro día mejor- dijo ella un poco nerviosa.
-Niall me ha dicho que si quedamos todos esta tarde y ya les presentamos a los demás a las chicas, ¿qué os parece?- Tamara cambió de tema enseguida.
-Me gusta la idea si son tan majas como tú seguro que me caen bien- dijo Harry con una gran sonrisa.
-Gracias- ella se ruborizó.
-Bueno no sería hora de que os vayáis, Lou se estará tirando de los pelos al ver que no llegamos a tiempo para comer- dijo Sia y todos nos reímos al imaginarnos las caras de los chicos.
-Si será mejor si queremos venir esta tarde, seguro que les gusta la idea- dije y nos encaminamos a la puerta de entrada.
-Hasta esta tarde chicos- dijo Tamara y nos abrazó y nos dio un beso en la mejilla a cada uno- todavía sigo sin creerme que estéis en mi casa- sonrió.
-Tienes todo el verano para hacerte a la idea- dije yo y su sonrisa se ensanchó.
-Adiós mis chicos- dijo Sia abrazándonos y nos dio otro beso en la mejilla- hasta esta tarde.
-Adiós preciosa y recuerda lo que te he dicho- dijo Harry guiñándole un ojo a Sia.
-Claro que lo recordaré señorito Styles, ¿qué se piensa usted? ¿Qué no tengo memoria?- se rieron.
-Por si acaso- se rieron un poco.
-Hasta esta tarde chicos- dijo Tamara y sonreí.
Salimos por la puerta con una gran sonrisa dibujada en el rostro. De verdad no había encontrado chicas que me cayeran mejor.
-Bueno Harry, ¿qué diablos habéis hecho tú y Sia arriba?- insinué.
-Lo que hicimos ella y yo allí arriba se queda en su habitación- dijo con misterio.
-¿Y no me lo vas a contar?- dije siendo un poco cotilla.
-Cuando ella lo cuente lo contaré yo- sonrió.
Avanzamos por la calle evitando hablar de ese tema y llegamos a casa riéndonos y gastándonos bromas todo el tiempo.

sábado, 19 de mayo de 2012

Feeling Like In Another World Cap 2/ Nos lloverá encima


Este capítulo es algo largo pero merece la pena!!! :D Espero que os guste mis lil' stars <333

[...Alessia...]
-¿Estás bien?- preguntó Paola a mi lado.
-Si, si, si... Es que me he quedado embobada- dije riéndome nerviosamente intentando disimular mi reciente descubrimiento.
-Para no quedarse embobada, estaba mirando el poster de Harry Styles- se rieron todas.
-Seguro que es eso- dijo Tamara sentándose a mi lado en la cama- aunque no quiera admitirlo siempre ha sido su favorito, ¿a qué sí Sia?
Por suerte el móvil de mi bolsillo comenzó a sonar con la canción de Good Feeling de Flo-Rida. Di un brinco por el susto y me levanté para cogerlo, seguro que era él. Saqué el móvil del bolsillo y suspiré de alivio al ver que el número final era el 21. 
-¿A dónde vas?- dijo Tamara cuando me levanté para irme a mi habitación.
-Es importante, me encantó conocerlas chicas- dije antes de salir.
-A nosotras también- dijeron ellas.
Corrí, bueno volé hasta mi habitación, casi me caigo por el camino, y entré en ella cerrando la puerta con el pestillo para que no entrara nadie. Descolgué y unas risas se escucharon al otro lado del teléfono.
-Hola- dije sentándome en mi cama.
-Hola por fin lo coges- reconocí la voz del chico de la playa, Harry.
-Ya es que mi hermana me entretuvo un poco y no pensaba contestar delante de ella.
-¿Por qué no?
-Ella es super fan vuestra y creo que le daría un ataque si descubre que estoy hablando contigo en este momento- me imaginé la cara de Tamara si se lo dijera y me empecé a reír.
-¡Ah! Ya sabes quien soy entonces... Mejor, así nos ahorramos las presentaciones- se rió él también- ¿Y tú no eres fan nuestra?
-Me gusta algunas de vuestras canciones pero ya está, mi hermana es la que si que es fan vuestra. 
-Quizás algún día podamos hacerla alguna visita, nos quedaremos aquí todo el verano... Pero bueno, a lo que iba, ¿dónde podemos quedar para el intercambio de móviles? 
-Pues no lo sé, me perdí para ir a la playa por lo que no tengo ni idea de donde podemos quedar.
-¿Tú también te perdiste?
-Si, ¿es qué tu también?- dije sorprendida, al menos ya no era la única tonta que se había perdido.
-Claro, las calles son tan parecidas que ya no sabía por donde ir- nos reímos los dos.
-¿Y si vamos a la playa? Los dos sabemos llegar hasta allí sin perdernos... O eso creo- nos volvimos a reír- ¿en el paseo de la playa entonces?
-Allí estaré Alessia.
-Prefiero que me llamen Sia- le dije con una sonrisa, me había caído bastante bien- ¿a las cinco?
-Vale a las cinco en el paseo de la playa- dijo y agregó- entonces, ¿de donde eres? Ese acento no parece muy inglés.
-Soy española pero desde hace casi dos años vivo en Londres.
-¿Ah si?
Y allí es cuando comenzamos a hablar de todo: de nuestra vida, de nuestros amigos, también me contó anécdotas graciosas sobre los demás chicos del grupo y sobre él y yo por supuesto le conté las mías. Era un chico bastante majo y normal para ser una super estrella como decía mi hermana, es más me gustó hablar con él. Era como si nos conociéramos de toda la vida y fuéramos los mejores amigos. Era extraño la verdad, nunca me había sentido así con alguien, quitando a Tamara por supuesto, pero me gustó esa sensación.
-Espera un momento- le dije cuando escuché unos golpes en mi puerta y grité en español- ¿quién es?
-Soy yo Sia- dijo mi hermana- baja ya es hora de comer.
-¿Ya?- dije, miré el reloj y me sorprendí por la hora, eran las dos de la tarde, si que había pasado tiempo hablando con él.
-Si, hay macarrones para comer, te vas a hartar de pasta- se rió.
-Vale ahora voy, estoy hablando por teléfono.
-Ok.
Escuché como se alejaba y volví a poner el teléfono en la oreja.
-Vale ya está, me tengo que ir a comer- le dije a Harry.
-Si a mi también me están llamando para ir a comer- nos reímos-. Hasta las cinco.
-Hasta las cinco- colgué y guardé el móvil en el bolsillo.
Quité el pestillo de la puerta y bajé las escaleras pensando en lo que haríamos esta tarde después de llegar al paseo, no quería solo darle su móvil y ya está, y creo que Harry tampoco quería eso. Encontré a todos sentados en la mesa esperando a que yo llegara para comer, hacía tiempo que no estábamos todos juntos. Entre el trabajo, las clases y los viajes de Peter y mi madre no teníamos tiempo de estar todos en casa. Quizás estas vacaciones eran para unirnos y pasarlas en familia.
-Hola Sia, ¿qué tal llevas el día? Tu madre me ha dicho que has ido a la playa- me dijo Peter con una sonrisa.
-Si, me perdí por el camino pero bueno me gustó mucho.
-Tu jovencita- Peter señaló a Tamara- deberías de enseñarle el pueblo así no se perdería. 
-¡Eh! Yo no tengo la culpa se despertó antes que yo y se fue así sin más- dijo Tamara llevándose un tenedor con macarrones a la boca.
-Eso es verdad, le dejé una nota en la mesa y me fui- dije encogiéndome de hombros-. Fue una decisión repentina.
-Podemos ir esta tarde si eso- dijo ella con la boca llena- quedamos con mis amigas, les has caído bien.
-No puedo he quedado- dije y me arrepentí de inmediato, no debería de haber dicho nada.
-¿Con quién?- dijeron mi madre y Tamara a la vez.
-Con... Con,- me quedé en blanco, no pensaba contarles que había quedado con Harry Styles porque tenía su móvil- un chico que conocí esta mañana en la playa y se ofreció a enseñarme el pueblo- dije, al menos no todo era mentira.
-¿Es de aquí? ¿Quién es? ¿Le conocemos?- preguntó mi madre.
-¿Cómo es? ¿Es guapo? ¿Le conozco?- preguntó Tamara.
-¿Vais a seguir haciéndole este interrogatorio policial?- preguntó Peter y le dirigí una mirada de agradecimiento.
-Pero quiero saber quien es ese chico papá- dijo con voz dulce.
-Eres una cotilla- le guiñé un ojo.
-No soy una cotilla, lo que pasa es que quiero saber información sobre todo lo que pasa- rodé los ojos y seguí comiendo.
El móvil de Harry volvió a sonar en el bolsillo de mis pantalones con otra canción, ¿la macarena? Saqué el móvil rápidamente y vi que en la pantalla ponía el nombre de Niall, creo que era el chico rubio de ojos azules. Levanté la vista y todos me miraban expectantes y esperando a decirles quien era, o para que yo cogiera el teléfono o para que me fuera a hablar con la persona que estaba llamando. Decidí levantarme y con otro "es importante" salí del comedor directa a mi habitación de nuevo. Descolgué antes de entrar en la habitación y echar de nuevo el pestillo.
-¿Si?
-Hola soy Harry, tu móvil se ha apagado así como así y no lo puedo encender porque me pide el pin- dijo y sonreí, ¿por qué sonreía con cada cosa que decía?
-Y quieres que te de el pin, ¿no?- me reí.
-No es eso, era por si en vez de las cinco te parecería mejor quedar a las cuatro, así te devuelvo el teléfono antes y yo recupero el mío. Le echo de menos- nos reímos.
-Vale- dije enseguida sorprendida por la rapidez en que lo había dicho, ¿pero qué me estaba pasando?- entonces a las cuatro.
-No te enrolles mucho Harry que lo tengo que poner a cargar- dijo una voz, seguro que era Niall pidiendo su teléfono-. Además la vas a ver ahora tendréis tiempo de hablar.
-Ahora espera un segundo- le dijo y yo me reí- bueno te dejo que me quitan el móvil ya. Hasta ahora preciosa- me dijo y me imaginé su sonrisa.
-Hasta ahora- le dije y colgué.
Alguien llamó a la puerta, abrí el pestillo (bendito pestillo en Londres no tenía) y me encontré con Tamara mirando a su teléfono que en cuanto abrí la puerta me miró.
-Hoy hago una fiesta de pijamas, vienen todas mis amigas, ¿te quieres quedar con nosotras?
-Claro, ¿cómo no iba a querer?
-Pues como has quedado con el chico ese pensé que esta noche saldrías por ahí con él- levantó una de sus cejas y me miró de forma "me lo tienes que presentar".
-No voy a salir con él esta noche, todavía no le conozco demasiado- otra mentira, creo que ahora si que nos conocíamos.
-Bueno pues estos días me lo tendrás que presentar, ¿no?
-Si estos días- dije temiendo el día en el que sepa quien es.
-Uff... Me voy que he quedado, ya que prefieres salir con el chico ese antes que con tu hermana querida, esta te la guardo- dijo mirándome de forma envenenada pero luego soltó unas carcajadas-. Adiós Sia, que te lo pases bien- me dio un beso en la mejilla y salió por la puerta.

[...Tamara...]
Que rara estaba Sia, no me quería decir quien era ese chico cuando nos lo contábamos todo. Quizás fuera un delincuente del que no podíamos saber o quizás fuera un chico mayor que ella, con 25 años o por ahí. No tenía ni idea pero no me quedaría de brazos cruzados para saberlo. Entré en mi habitación y me quedé mirando los posters de mi grupo favorito One Direction. Me encantaban desde que salieron en The X Factor y me siguen gustando, sinceramente nunca me había gustado tanto un grupo. Decidí cambiarme de ropa y ponerme una camiseta verde con un tucán, unos shorts y unas vans de color blanco. Me deje mi pelo negro suelto y liso como lo tenía siempre y me pinté la raya en los ojos. El timbre sonó justo cuando salía de mi habitación y bajé las escaleras rápidamente para abrir la puerta y encontrarme con Estela, Lotta y Paola.
-Hola preciosa, ¿qué hacemos hoy?- me dijo Lotta con una sonrisa.
-Bueno, ¿damos primero una vuelta? Hace dos años que no veo el pueblo.
-Si te echábamos mucho de menos- dijo Estela dándome un abrazo.
-Yo más a vosotras.
Ellas eran mis amigas aquí y las quería con locura. Cada una era diferente de la otra y eso creo que nos unía aún más. Estela era una chica dulce y muy muy loca, justo igual que Sia, sabía que se llevarían muy bien las dos, le gustaba mucho la música e irse de fiesta con los amigos. Lotta era la chica más divertida y bromista que he conocido nunca, siempre tenía alguna broma y nos alegraba el día si veía que estábamos tristes, le gustaba las películas y muchas cosas más, le gustaban tantas. Y por último Paola era una chica muy guapa y una gran persona, le gustaba mucho leer y escribir, tenía un gran talento para escribir. Nos fuimos andando por la calle hablando de tonterías, cantando las canciones de One Direction que a ellas también le gustaba y riendo sin parar. Estas iban a ser unas vacaciones inolvidables.

[...Harry...]
¿Cuánto faltaba para que dieran las cuatro? Se me estaba haciendo eterna la espera y quería que pasara rápido para volver a ver a Sia. Me había impresionado su forma de ser despreocupada, optimista y alegre y quería conocerla más y más. Podía hablar con ella como si fuera un chico cualquiera y eso nadie hasta ahora me lo había hecho sentir. Estaba poniendo de los nervios a los demás porque me miraban cada dos por tres y no paraban de gastarme bromas sobre las ganas que tenía de que llegaran las cuatro.
-Deberías de verte la cara Harry- dijo Lou riéndose con los demás- estás más ansioso que Niall en la cena de Navidad y mira que eso ya es decir.
-Eso no te lo discuto- dijo Niall y más risas acompañaron esa frase.
-Creo que nuestro Harry se ha enamorado- dijo Zayn despeinándome.
-No estoy enamorado.
-Mientes- dijo Liam.
-Más claro agua de que mientes- dijo Niall.
-Pero si se te nota Harry a nosotros no nos puedes mentir- dijo Lou dándome una palmadita en el hombro.
-Que pena que el teléfono se haya apagado quería ver como era esa chica- dijo Zayn.
-Estoy deseando conocerla... Es la primera chica que le grita al mismísimo Harry Styles uno de los mejores seductores el mundo- dijo Niall comiéndose una bolsa de patatas.
-Después de mi claro está- dijo Zayn pasándose una mano por el pelo como para presumir.
-Yo creo que está igualado a ti- agregó Liam cambiando el canal de la televisión.
-En eso tiene Liam razón- dijo Niall con la boca llena.
-Pues yo creo que no... Harry es el más sexy del mundo- dijo Louis saltando encima del sofá y aplastándonos a todos.
-Joder Lou que nos matas- dijo Zayn quitandole de encima.
-Fuera ya me has aplastado las Lays-dijo Niall tirando a Louis al suelo.
-Harry son casi las cuatro te tendrás que ir ya, ¿no?- dijo Liam riéndose, hay que ver lo que se estaban riendo de mi esta tarde, pero sabía que lo hacían con cariño.
Miré el reloj y vi que quedaban diez minutos para las cuatro, tendría que salir ya para llegar a tiempo.
-Bueno chicos me voy- dije levantándome del sofá.
-Que te lo pases bien- dijo Niall.
-Gracias.
-Adiós Harry- dijeron todos y salí por la puerta poniéndome las gafas de sol.
Me encaminé hacia la playa, ahora las calles me parecían más familiares y pude encontrar la playa con facilidad. En la playa había muchísima más gente que está mañana y algunas chicas, habían muy pocas, se acercaron a que me sacara una foto con ellas o que les firmara un autógrafo. Me senté en uno de los bancos que estaban en el paseo y esperé a que Sia llegara, la verdad quería que viniera ya. Alguien me tapó los ojos y puso sus labios en mi oído.
-¿Quién soy?- dijo con voz grave pero la reconocí al instante.
-¿El hombre del saco?- dije con una sonrisa.
-Que tonto eres, soy yo- me quitó las manos y se sentó a mi lado con una sonrisa.
-Ya lo sabía- dije guiñándole un ojo a Sia.
Estaba guapísima con lo que llevaba puesto, pero no era lo mismo de esta mañana. ¿Se había puesto otra ropa para venir? Tenía una camiseta azul turquesa, unos pantalones cortos y unas converse negras.
-¿Qué pasa?- miró su ropa y se rió- ¡Ah! Mi ropa, me pinté las uñas porque me aburría y se me cayó el bote encima, además quiero usar toda la ropa que tengo en mi armario- rodó los ojos.
-Te queda muy bien el azul.
-Gracias- vi como se sonrojaba- ¿Has traído mi móvil?
-Ajá aquí está- lo saqué del bolsillo de mis pantalones y se lo di- ¿Tienes tu el mío?
-Si- sacó el móvil y lo puso en mis manos- a propósito le he quitado el volumen, no paraba de sonar desde que me llamaste la última vez.
Miré rápidamente quien me había llamado y quien me había enviado los mensajes y luego lo guardé, luego tendría tiempo de sobra. Ella encendió el suyo y tecleó el pin, el móvil sonó con una canción de David Guetta, Turn me on, y miró también por encima lo que tenía.
-Madre mía la de mensajes que me han llegado- guardó el móvil y me miró- ¡Bah! Luego los miro ahora no me apetece.
-¿Nos vamos a quedar aquí o damos mejor una vuelta?- le ofrecí para no estar todo el tiempo sentados sin hacer nada.
-Prefiero dar una vuelta odio estar mucho tiempo sentada, una cosa, ¿llevabas mucho tiempo aquí?
-No casi nada- sonrío y nos levantamos.
Echamos a andar y hablamos un poco mientras recorríamos las calles de aquel pequeño pueblo y las memorizábamos para no volver a perdernos. Hablábamos, nos reíamos, nos gastábamos bromas... Era como si fuera mi amiga de toda la vida.
-¿Y qué tal llevas el italiano?- me preguntó al cabo de un rato.
-Si te digo la verdad, entiendo muy muy poco, ¿y tú?
-Ya se italiano, se parece mucho al español y mi hermana me enseñó a hablar. Por lo que entiendo todo lo que me dicen, si nos insultan o algo lo entenderé- nos reímos.
-¿Vamos por allí?- le señalé una calle al azar, no tenía ni idea de adonde iba pero me daba igual.
-Vale- sonrió- me gustan tus gafas de sol- se acercó a mi y me las quitó de los ojos con un rápido movimiento y se las puso- ¿qué tal me quedan?
-Mejor que a mi la verdad- dije intentando quitárselas pero ella escapaba de mis manos- ¡Ey! Devuélvemelas- dije riendo intentando alcanzarla pero ella salía corriendo.
-No, tendrás que cogerme para recuperarlas señorito Styles- se dio la vuelta para enfrentarme con la mirada y echó a correr.
Me empecé a reír por lo que estaba haciendo y salí corriendo detrás suya para cogerla. Esta chica cada vez me sorprendía más y más y me encantaba. Pronto llegamos a un parque lleno de césped, la alcancé rápidamente y la cogí de la cintura para pararla y le hice cosquillas en los costados.
-Para Harry por favor- dijo intentando zafarse de mi abrazo y riéndose a carcajadas.
-No hasta que me devuelvas las gafas- dije en su oído.
-Me las voy a quedar que lo sepas.
Seguí haciéndola cosquillas pero nos tropezamos y nos caímos y ya allí nos reímos a carcajadas, nunca me lo había pasado tan bien. Paramos al rato y ella se secó las lágrimas de los ojos de lo que se había reído y a mi me dolía el estómago. Nos tumbamos en la hierba y miramos al cielo.
-Eres malo me has echo llorar- dijo ella y reímos un poco más.
-Y tu eres también muy mala me has quitado las gafas- vi como las cogía del suelo justo al lado suya y me las dejaba encima del pecho-. Ten, te las puedes quedar tengo otras iguales- se las dejé a su lado.
-Mmm... Gracias, pero tendré que dar una explicación sobre de quien son- sonrió y me guiñó un ojo.
-Bueno puedes decirles que son del chico de la playa- me encogí de hombros.
-¿Sabes una cosa? Espero que mi hermana no descubra que son tuyas, me la estoy imaginando haciéndoles un altar con tu foto y unas velitas- nos volvimos a reír, hay que ver lo que nos estábamos riendo esta tarde.
-¿Puedo hacerte una pregunta?
-Ya la estás haciendo- sonrió de forma burlona.
-Ja ja ja, que graciosa- dije sarcásticamente.
-¿A qué si? Es una de las muchas virtudes que hacen de mi persona- se rió y yo la despeiné-. Ahora en serio, suelta la pregunta.
-Si como me has dicho Tamara es tu hermanastra y Peter es tu padrastro...¿Qué ha sido de tu padre?-su rostro le cambió por completo de estar alegre a uno lleno de dolor- He echo mal en hacer esa pregunta- dije sintiéndome mal por haberle hecho recordar algo que no quería.
-No, es solo que bueno... Me resulta difícil hablar de mi padre con alguien que no sea mi madre o Tamara.
-¿Murió?
-No, nos abandonó a mi madre y a mi cuando tenía tan solo 5 años.
-Oh vaya...- no sabía que más decir ni que hacer ahora.
-Pero lo pasado pasado está y ahora lo que quiero es ir a comer un helado- sonrió y volvió a recuperar la alegría en su rostro.
-Muy bien señorita- me levanté y la ayudé a ella- vamos a encontrar alguna heladería y nos comemos un helado, pero una cosa antes.
-¿Qué?- dijo ella mirándome de forma divertida.
-Que pago yo.
-Y no puedo negarme, ¿verdad?- dijo empezando a caminar.
-No, no puedes negarte soy un cabezota y tengo un maravilloso poder de persuasión- le guiñé un ojo.
-Está bien no me negaré, pero la próxima vez pago yo- cuando dijo esas palabras una sonrisa se dibujó en mi cara, la vería más veces.
Buscamos una heladería y al cabo de un rato la encontramos en una bonita plaza, había una iglesia a uno de los lados, una fuente llena de niños jugando con el agua, una terraza con gente tomándose algo riendo y hablando y macetas con flores. Pedimos los helados uno de limón para ella y uno de chocolate para mi, bueno más bien los pidió ella porque yo no sabía decir nada en italiano, y nos sentamos en uno de los escalones de la fuente.
-Mmm... Que rico está.
-Y que bien sienta uno con este calor- me limpié el sudor de la frente teatralmente y ella se rió.
-Pues si- se quitó el pelo de la cara y siguió comiéndose su helado-. Quiero saber una cosa.
-Dispara.
-¿Miraste mis fotos?
-No- dije pero parecía poco convencida con lo que le dije- ¿Es qué no me crees?
-Si- dijo enseguida pero no la creí.
-Me estás mintiendo señorita García.
-Vale es que no me lo creo ya está.
-No he mirado tus fotos en serio te lo juro- dije poniendo la mano en alto- y si es mentira que nos llueva encima.
En ese momento noté agua por encima nuestra, era que uno de los niños que se había caído dentro de la fuente y las salpicaduras nos llegaron todas a nosotros empapándonos. Y allí empezaron las carcajadas de verdad, muchas más que en el parque y creo que más que en toda mi vida. Nos reíamos sin parar y ya podía notar como las lágrimas corrían por mis mejillas y vi como en los ojos de Sia también habían. Menuda coincidencia tan particular que tenía que pasar justo cuando decía eso. La madre del niño que se había caído la fuente fue corriendo a ver a su hijo, le reprendió pero luego se rió un poco y le dejó correteando por la plaza con los demás niños.  Mientras nosotros seguíamos riendo por mi frase pero al rato paramos limpiándonos las lágrimas.
-Nunca me había reído así en serio- dijo ella llevándose una mano al estómago.
-Yo tampoco- me pasé una mano por el pelo.
-Bueno entonces estas circunstancias me hacen pensar que si que has mirado mis fotos- me miró de forma burlona.
-No he mirado tus fotos de verdad- le dije totalmente serio y vi que Sia se lo creía.
-Te creo Harry pero la próxima vez di solo que no cotilleaste mis cosas- me guiñó un ojo y miró su móvil- ¡Qué tarde es!
-¿Qué hora es?- me acerqué y miré que eran las 19:30.
-Creo que debería irme, hoy tengo una fiesta de pijamas con mi hermana y sus amigas y seguramente hayan llegado ya- dijo levantándose del escalón de la fuente y yo hice lo mismo.
-Te acompañaré hasta tu casa.
Caminamos hasta su casa hablando de tonterías y llegamos rápidamente a su casa, podríamos decir que ya nos sabíamos el pueblo y que no nos volveríamos a perder.
-Esta es mi casa- señaló a una gran mansión entre dos casas también grandes.
-¿Vives aquí?
-Es mi casa de vacaciones, aún te falta por ver la finca de la bodega de Peter, es aún más grande y encima tiene una playa- dijo indiferente, como si no le importara nada de esas cosas-. Algún día podremos ir, no está muy lejos de aquí y si eso yo me llevo a mi hermana y sus amigas y tu puedes traerte a los demás.
¿Eso sonaba a qué quería volver a verme? ¿Qué está no sería la última vez que nos veríamos? Le dediqué una sonrisa.
-Pues entonces hasta otro día Sia- le dije.
-Adiós Harry- se puso de puntillas y me besó la mejilla- espero volver a verte chico de la playa- se puso las gafas de sol que le regalé y nos reímos.
-Puedes llamarme, enviarme un Tweet o un mensaje si quieres que quedemos de nuevo- sonreímos.
-Está bien nos vemos- se dio la vuelta y entró en la inmensa casa no sin antes despedirse de mi con la mano.
Cuando la vi entrar me encaminé directo a mi casa pensando en ella, su sonrisa, su divertida forma de ser y en que haríamos la próxima vez que nos viéramos.





lunes, 14 de mayo de 2012

Feeling Like In Another World Cap 1/ Cambio accidental

Bueno esto es un Fanfic de One Direction!!! :) Espero que os guste y que comentéis!! 




El sonido de La alarma de mi móvil comenzó a sonar a eso de las ocho y media de la mañana, me despertó y gruñí. Lo apagué y refrené las ganas de estamparlo contra la pared o de levantar la persiana y tirarlo por la ventana. El móvil era nuevo, un Iphone, y no sabía como usarlo bien así que tenía muchos problemas con él, como por ejemplo la alarma que sonaba cuando quería. Normalmente lo apagaba por las noches pero después de todo lo que pasó ayer se me había olvidado por completo. El día anterior había estado de viaje desde Londres hasta un pequeño pueblo costero de Italia donde me quedaría todo el verano. Esto estaba previsto desde hacía meses, mi madre y mi padrastro, Peter, tenían que hacer unos negocios aquí en Italia por lo que aprovecharían para pasar unas buenas vacaciones en una de las mansiones que Peter había comprado aquí. Él era un gran empresario, vendía vinos en todo el mundo por lo que su nombre era muy reconocido. Os preguntaréis como se conocieron mi madre y él, es una historia muy sencilla de contar. Mi madre es chef, una de las mejores, y se conocieron en una fiesta. Después de esa noche comenzaron a quedar, a los dos meses comenzaron a salir como pareja y cuatro meses más tarde se casaron. Todo ocurrió muy rápido sinceramente, pero en seguida te das cuenta de lo mucho que se quieren. Peter tiene una hija, se llama Tamara y tiene la misma edad que yo. Nos llevamos muy bien y nos consideramos auténticas hermanas. Mi relación con Peter también era muy buena, teníamos muchas cosas en común por ejemplo en deportes y en ordenadores  Me levanté de la cama porque no me volvería a volver a dormir y subí la persiana para que los rayos de sol me despejaran, pero me llevé una decepción al descubrir que el cielo estaba nublado. Genial. Si llovía me tendría que quedar aquí todo el día. Estuve barajando las posibilidades de volver a dormirme pero se me ocurrió una idea brillante, me iría a pasear a la playa sola y así conseguiría olvidarme de todo aunque solo fueran unos instantes. Me fui al armario y me quedé mirando la cantidad de ropa que mi madre y Tamara me habían comprado hace nada con la excusa de "hay que renovar el vestuario". Por suerte rescaté mis camisetas y pantalones favoritos de las bolsas de basura que se iban a donar a organizaciones que daban ropa a los que más lo necesitaran y los escondía en el fondo del inmenso armario que tenía en la habitación. Todavía no me podía poner nada de mi antigua ropa porque si no se darían cuenta por lo que busqué algo normal entre los cajones y las perchas. Encontré rápidamente una camiseta roja con un dibujo negro en el centro, unos vaqueros cortos y unas chanclas. Agradecí que Tamara tuviera el mismo gusto que yo en lo que a moda se refiere. Después de vestirme entré al baño y me arreglé un poco, me dejé mi pelo moreno suelto y me pinté la raya en el ojo. Salí del baño, me guardé el monedero con el dinero que tenía en el bolsillo al igual que el móvil y salí por la puerta para irme a la cocina a desayunar algo. La habitación de Tamara estaba justo al lado de la mía y estaba la puerta abierta por lo que pensé que al llegar a su habitación lo primero que hizo fue acostarse en la cama y quedarse dormida. Pero me equivoqué al descubrir que había pegado algunos posters de su grupo favorito One Direction (yo no era muy fan de ellos, me sabía unas canciones y ya está) en la pared y había cambiado la distribución de los muebles. Normal que se hubiera dejado la puerta abierta, estaría tan cansada que ni se hubiera dado cuenta de eso. Le dejé una nota en su escritorio poniendo: "Estoy en la playa, mándame un mensaje cuando te despiertes si ves que no estoy". Seguí mi camino y al cabo de un rato encontré la cocina, cogí unos bollos y un zumo de naranja y me fui por la puerta delantera cogiendo unas llaves que había dejado Peter en el recibidor. Aunque el día estuviera nublado no quitaba que hiciera un calor asfixiante. Recorrí las calles laberínticas e idénticas del pueblo mientras comía, buscando la entrada de la playa o alguna señal de donde estaba, pero nada. Pasó una hora y por fin al fondo de una calle vi un pedacito de arena y mar. Fui corriendo hasta allí por las ansias de llegar y cuando estuve en la arena me quité los zapatos para caminar mejor. No había nadie a estas horas, bueno sin contar las gaviotas que revoloteaban por la playa buscando algo para comer, seguro que era por este tiempo. La brisa hacía que mi pelo danzara de aquí para allá y que se me metiera en la boca y en los ojos por lo que cogí un coletero de mi muñeca y me hice una coleta alta, así seguro que no me molestaba y estaba un poco más fresquita. En ese momento pensé en lo que haría aquí en el verano, según Tamara dentro de algunas semanas habría un festival muy bonito en el que el pueblo se llenaba de gente y había muchas cosas para hacer. Pero como ya he dicho faltaban unas semanas y todavía me quedaba por pensar que era lo que haría durante estas semanas y las siguientes del festival. Mientras pensaba en algunos planes alternativos para hacer en mi estancia aquí y miraba los mensajes que me enviaban algunos de mis amigos no vi al chico con el que me choqué y nos caímos al suelo. Miré al chico que tenía el pelo castaño y rizado y los ojos de un bonito color verde. 
-¡Oh vaya! Lo siento, perdóname no sabía por donde iba-dijo el chico en inglés, lo cual me sorprendió quizás fuera un turista, se levantó y me ofreció la mano para ayudarme.
-¡¿Pero no puedes mirar por donde ibas?!- le grité enfadada- ¡Hay mucha playa por la que pasear!
Él se me quedó mirando como si estuviera loca o como si no entendiera mi particular enfado. Creo que me había pasado un poco, pero mi agobio lo tenía que pagar con alguien. Agaché la mirada avergonzada de lo que había hecho y vi que se me había caído el móvil.
-Siento haberte gritado- me disculpé mientras cogía mi teléfono- es que estoy muy agobiada y llevo un mal día y cuando estoy así lo pago con todo el mundo- saqué una pequeña sonrisa que él enseguida correspondió.
-No pasa nada, yo también tengo algún que otro mal día.
Le miré mejor y su rostro me resultaba muy familiar, demasiado diría yo. 
-¿Te conozco?
-Quizás- volvió a sonreír y se encogió de hombros.
-No, creo que no, te habré confundido con otra persona- me di la vuelta metiendo el móvil en el bolsillo y comencé a caminar- lo siento de nuevo- le dije por encima del hombro, me despedí de él con la mano y seguí mi camino por la playa dirección a mi casa.
[...HARRY...]
Vi a esa chica irse y la estuve observando hasta que la perdí de mi vista. Tuve unas ganas locas de preguntarle cual era su nombre pero las palabras no me salieron. Hacía tiempo que nadie se enfadaba de esa forma conmigo, y menos una chica, y eso me había dejado un tanto sorprendido. Cogí mi móvil que también se me había caído en la arena, lo metí en el bolsillo de mis pantalones y comencé a caminar pensando en todo. Esa mañana me había despertado temprano para pasear un rato por la playa y como los demás estaban dormidos no quería molestarlos para ir a dar una vuelta. Lo más seguro era que me hubiera llevado algún golpe con alguna almohada o algún que otro insulto. Habíamos planeado pasar las vacaciones aquí para relajarnos y disfrutar, además queríamos estar en el festival que se celebraría en unas semanas. Quería que este verano fuera especial e inolvidable, lo conseguiría costara lo que costara, y un presentimiento de que el verano podría ser mejor si conociera a esa chica inundó todo mi cuerpo. Lo malo es que no sabía absolutamente nada de ella, solo me quedaba rezar para encontrarme con ella por la calle. Cuando me quise dar cuenta de por donde iba ya estaba llegando a las calles del pueblo por lo que me volví a poner las chanclas y seguí caminando. Esperaba que esta vez no me volviera a perder, me perdí y estuve como una hora buscando la playa. Por suerte reconocí las calles y me fue mucho más fácil encontrar la casa que habíamos alquilado todos para pasar las vacaciones. Era una casa bastante grande y bonita además estaba un poco alejada de todo.  Abrí la puerta y al entrar tuve que apartarme de la trayectoria de un cojín que le dio a Niall en toda la cara.
-¡Eh! Que yo no te he tirado nada- gritó Niall tirando el mismo cojín a Liam.
-Bueno por si acaso- dijo Liam riéndose-. Hola Harry, ¿dónde estabas?
-Me fui a dar un paseo a la playa- dije entrando dentro de la casa y cerrando la puerta.
-Podíamos haber ido contigo- Niall cogió una magdalena de la cocina y le dio un bocado.
-Bueno déjalo, estabais dormidos y si os despertaba...
-Te hubiéramos echado a patadas de las habitaciones- terminó Liam la frase.
-Exacto- nos reímos-¿Y los demás?- pregunté mirando al salón y vi que no había nadie más. 
-Lou y Zayn siguen durmiendo, yo me desperté el primero y luego Niall en cuanto olió las tostadas que estaba haciendo- nos volvimos a reír.
-Es que olía tan bien y sabían mucho mejor.
Como siempre Niall pensando en comida. Me senté en el sofá y puse la tele buscando algún canal de música porque los demás estaban en italiano y no entendíamos ni papa. 
-¿Sabes qué te llamamos?- preguntó Niall sentándose a mi lado en el sofá con otras tres magdalenas.
-¿Ah si?- dije sacando el móvil del bolsillo.
Encendí la pantalla y la foto que vi no era la que tenía yo de fondo. Era una chica con los ojos marrones verdosos y una bonita sonrisa en los labios que reconocí al instante. La chica de la playa, se llamaba Alessia por lo que vi en la pantalla. El corazón me comenzó a latir más y más rápido al saber que tenía una excusa para volver a verla y al menos conocernos un poco más.
-Este no es mi móvil- dije y Liam y Niall miraron a la pantalla.
-¿Entonces de quién es?- dijo Liam quitándome el móvil de las manos.
-Seguro que será de la chica con la que me choqué en la playa.
-Entonces... Ella tiene tu móvil- dijo Niall cogiendo el teléfono de las manos de Liam.
-¡Oh no!- eso fue lo que dije pero en mi cabeza se escuchó un "¡Oh si!".
[...Alessia...]
Llegué a mi casa sin perderme y sintiéndome todavía una estúpida. ¿Por qué le había gritado? Esperaba no tener que encontrarmelo mientras estaba aquí, no sabría donde meterme si le veía. Abrí la puerta y Rosetta, la sirvienta, me recibió con una gran sonrisa.
-Hola señorita- me dijo ella en español con un acento italiano.
-No me llame señorita, me puedes llamar Sia- sonreí, no soportaba que me llamaran así y todavía no me había acostumbrado a tener sirvientes que nos hicieran todo.
-Como quieras Sia-me guiñó un ojo y se fue a seguir limpiando los muebles del recibidor. 
-¿Mamá?- dije mientras entraba al gran salón principal y escuchaba el ruido de la tele.
-Hola Sia, ¿qué tal has dormido?- me preguntó y sonrió.
-Bien, ¿te ha dicho Tami donde he estado?
-Si, ¿te gustó la playa? ¿Y el pueblo?
-Si no está mal, lo que pasa es que no había nadie por las calles-me encogí de hombros y me callé con el incidente del chico de la playa.
-Bueno me alegro de que te guste- volvió a sonreírme y fijó su vista en la televisión.
Me di la vuelta y comencé a subir las escaleras arrastrando los pies con unas ganas de llegar a mi cama y acostarme un rato o tocar la guitarra. Saqué el móvil del bolsillo y al desbloquear la pantalla me quedé paralizada en el sitio. Este no era mi fondo y este no era mi móvil. Ay dios no, era el móvil del chico de la playa. Mierda, mierda, mierda cogí el móvil que no era y ahora tenía el suyo. Recé para que me llamara él ya que mi número era nuevo y no me lo sabía muy bien, solo sabía que acababa en 21. Genial, más que genial ahora le tendría que volver a ver y pasar aún más vergüenza. ¿Pero tan mala suerte tenía yo? Seguí subiendo las escaleras, ahora a todo correr, para entrar a mi habitación y que nadie supiera que no tenía mi teléfono.
-¡Sia!- gritó mi hermana en cuanto pasé por delante de su habitación- Ven aquí por favor.
-Ahora no puedo.
Me asomé a la puerta y habían tres chicas más sentadas en la cama de mi hermana.
-Mira son las chicas de las que te hablé- dijo con una sonrisa y yo pasé a saludarlas- esta es Paola- me señaló a una chica con el pelo rubio oscuro y los ojos marrones claros- esta es Estela- ella era una chica con el pelo de un moreno rojizo y los ojos marrones- y por último Carlotta pero todo el mundo la llama Lotta- me señaló a una chica con el pelo rubio y los ojos azules.
Le di dos besos a cada una y me senté en la cama junto a ellas, se quería que no se dieran cuenta de lo del móvil era mejor disimular que no pasaba nada. Hablaban de todo, de las clases, de chicos, pero sobre todo de música. 
-Tami me encanta como has dejado la habitación, te ha quedado maravillosamente bien- dijo Estela señalando a las paredes con los posters-. Me encanta One Direction.
-Son prefectos- suspiró Paola.
-Lo siguiente de perfectos- dijo Tamara poniéndose un mechón de su pelo negro detrás de la oreja.
-Pues si- añadió Lotta.
Entonces miré los posters y el alma se me cayó a los pies cuando le vi, miré el bolsillo donde estaba el móvil disimuladamente y luego de nuevo al poster. El chico de la playa. Con sus característicos rizos castaños oscuros, sus ojos verdes y una gran sonrisa. El chico de la playa se trataba de Harry Styles uno de los miembros del grupo One Direction. El grupo del que Tamara y sus amigas eran fans.